domingo, 7 de enero de 2024

La noche más larga

 La noche más larga



Regresar a este blog es como abrir una cápsula del tiempo: un encuentro con mi yo pasado que ni yo misma reconocía...

Hace ya varios años que no escribo aquí, en este tiempo he escrito para otros foros, redes sociales y webs pero no este, mi blog. Hoy me decidí a volver y me sorprendió leer a mi yo de aquel tiempo, sus pensamientos, sus ideas. Ha sido casi como si no reconociera a esa otra Isabel, esa otra versión mía que vivía allá por 2017 y que sentía la necesidad de expresarse de aquella forma. Poco sospechaba entonces de que las cosas cambiarían tanto. 

Para los que solían leer mis entradas, puede que les extrañase mi marcha y se pregunten qué la motivó, para los que no me han leído nunca, espero que en estas líneas encontréis algunas razones para continuar haciéndolo.

Mucho ha pasado desde aquella última entrada. Verdaderamente ha sido, como dice la canción canción de Sôber, La noche más larga. En estos años de silencio, he atravesado mares de cambios, cada ola redefiniendo quién soy y lo que creo

Tras releer todas las entradas antiguas, he decidido ocultarlas (al menos por el momento) y dar una nueva imagen al blog con el propósito de reflejar de una mejor manera mi evolución y crecimiento personal en mi noche más larga.
La idea no es sólo compartir estas vivencias, quisiera creer que puedan servir de ayuda a otras personas que también atraviesan su noche oscura, e insuflarles esperanza y ánimos para continuar buscando su propio amanecer, lleno de luz, donde escribir nuevos capítulos de sus vidas, lejos de tinieblas y oscuridad.
Es precisamente esto lo que yo anhelaba descubrir cuando me encontré sumergida en las sombras, cuando la penumbra de mi mundo se tornó en una oscuridad abrumadora y apenas podía discernir los contornos de la vida que me rodeaba. Créeme, las pequeñas chispas de luz hacen una gran diferencia.

Si decides quedarte en esta nueva etapa del blog, juntos descubriremos que incluso la noche más larga cede paso al amanecer.